¿Cómo se forman las montañas?

Había una vez, hace millones de años, un gran continente llamado Rodinia. Era como un gigante paciente sentado en medio del océano, haciendo una extensa siesta. La vida era tranquila, los días eran largos y las noches eran apacibles.

Pero un día, Rodinia decidió que quería moverse. Comenzó lentamente, dividiéndose en dos grandes masas de tierra. Mientras se separaba, algo comenzó a ocurrir en las costuras de esta gran división. Debajo de la superficie, el calor del corazón de la tierra hizo que las rocas se derritieran, empujando hacia arriba. Poco a poco, se formaron volcanes y montañas. Esas montañas se llaman montañas volcánicas, como las que se ven en Hawai.

Pero las montañas no sólo se formaron gracias a la actividad volcánica. Al mismo tiempo, Rodinia seguía separándose y creando dos grandes continentes, Norteamérica y África. Dos de sus tíos, los placas tectónicas, estaban debajo de ellos, empujándose entre sí. Como dos niños luchando por un juguete, los dos tíos empujaban cada vez más fuerte, sin darse cuenta de que estaban empujando las masas de tierra arriba, hasta que ¡bum! Las montañas se crearon. Es eso lo que le pasó a los Alpes en Europa.

Mientras tanto, en el continente de Gondwana, los hermanos Rodinia pequeños, se estaban formando más montañas. Pero esta vez fue distinto. La tierra comenzó a enfriarse y contraerse lentamente, como cuando se dejan congelando las cosas en un refrigerador. Grandes piezas de tierra se empujaron contra otras, creando pliegues en el suelo, formando las Montañas Rocosas. Estas montañas se llaman montañas plegadas.

Mientras tanto, en el continente del norte, la erosión dio lugar a cuatro grandes montañas. La lluvia, el viento y el hielo constantemente socavaron las montañas volcánicas y los plegamientos. Estas fuerzas poderosas estaban trabajando juntas para crear montañas posibles. Poco a poco, se formaron cuatro montañas y un parque que nombraron los campesinos alrededor de ellos, el Parque de las Cuatro Montañas.

Así, los niños, las montañas son formadas por tres grandes procesos geológicos. Uno es la actividad volcánica, que nos da conos de fuego enormes. El segundo es la tectónica de placas, que mediante la lucha de una placa contra otra, empujan la tierra hacia arriba, formando montañas. Y el tercero es la erosión, que lentamente socava las montañas, creando pequeñas, pero magníficas formaciones. Todo esto lleva millones de años, pero lo que resulta es algo maravilloso.

Hasta la próxima.

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